Uno de los patrones de velas más sencillos es el de las Tres Velas Blancas: un conjunto de 3 velas alcistas en el que cada cierre está por encima del cierre anterior.
Se trata de una tendencia alcista.
Tiene pocas posibilidades de cambiar.

Las pautas de perforación suelen indicar una próxima inversión.
Lo que tenemos aquí es una vela descendente seguida de una ascendente cuyo cierre está por encima del centro de la roja.

Una pauta envolvente es aquella en la que 3 velas son envolventes dentro de una vela opuesta.
Este patrón indica que estamos en medio de una corrección o retroceso.

La cobertura de la NUBE oscura se compone de una vela descendente que sigue a una ascendente cuya apertura está por encima del cierre de la verde y el cierre – por debajo de la línea 1/3 de la vela verde.
Aquí esperamos una inversión hacia un mercado bajista.

Otra inversión hacia un mercado bajista viene indicada por una pauta de Estrellas Fugaces: una vela alcista seguida de una bajista corta cuyo cierre está por debajo de la apertura de la vela anterior.

Una estrella matutina significa una inversión hacia un mercado alcista.
A una vela roja le sigue una corta y luego una larga alcista cuyo cierre está por encima de la mitad de la primera vela.

Y, por último, una estrella VESPERTINA es lo contrario de la estrella matutina: una vela verde seguida de 2 velas bajistas, corta y larga, con el cierre de la última por debajo de la mitad de la primera.

La historia de los patrones de velas es realmente fascinante.
Se dice que las inventó un multimillonario comerciante de arroz que entrelazó la psicología de las multitudes y la meteorología con las creencias tradicionales japonesas y una red de informadores y agentes.
Munehisa Homma se adelantó siglos a su tiempo, y sin duda aún no hemos aprendido ni una fracción de lo que sus candeleros tienen que enseñarnos.